Viaje de trabajo: NYC
Aunque trabajo en remoto, un par de veces al año me toca ir a New York y Toronto. Suena más glamouroso de lo que en realidad es.
He ido ya unas cuantas veces y no pensaba escribir aquí sobre ello, pero ando leyendo un libro de Danny Gregory y me he encontrado con este texto que describe la sensación a la perfección.

El vuelo salió más de una hora tarde, con nosotros ya dentro, porque todo estaba congelado. Un par de días antes cayó más de un pie de nieve y estaba seguro de que me iban a cancelar el vuelo. Cuando llegamos ya era de noche. Quería haber probado alguna pizzería de las que tengo en mi lista, pero todas cierran a las 22h. Podría haber llegado de no ser porque en LaGuardia me tocó esperar al Uber más de una hora. Al final llegué al hotel pasadas las 23h.

Algo que me sigue chocando es cómo apilan la basura en la calle. No sé si es exclusivo de Manhattan o todo NY. En Chicago tenemos contenedores.

Este camión estaba aparcado en la puerta del Joe's Pizza donde cené. Una frase muy 0,60.

Cuando llegué ya estaba todo cerrado y yo tenía un montón de hambre. Cerca del hotel había una sede de la NYU y al lado un Joe's Pizza. Hay un montón de ellas por toda la ciudad y todas tienen las mismas fotos con famosos. No sé cual es la original y cuales viven de la fama de la original Las pizzas están ricas y no son muy caras. Las dos porciones y el agua salieron a $13.
Hace unos años estuve en NYC de visita con amigos y fuimos a un par de Joe's diferentes.

Como no tenía que ir a la oficina hasta las 10, salí a dar una vuelta y acabé desayunando en The Grey Dog. Tienen diferentes localizaciones. Yo estuve en el de Union Square. Unas tostadas y un café por $30.

Aunque de normal comemos en la oficina, un día nos llevaron a Rosa Mexicano, donde pedí unas enchiladas de langosta. Pagaba la empresa, así que no miré el precio. En general la comida bien, pero no iría por mi cuenta.

Y ya está. Otras veces me guardo algo de tiempo para patear por la ciudad y hacer turismo, pero esta vez no me sentí con ganas. Aproveché para quedar con un ex-compañero de la zona y fuimos de bares.